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martes, 6 de octubre de 2015

Conjuro: El secreto imposible

Un conjuro de cosecha propia para La Puerta de Ishtar. Cuidado, puede herir sensibilidades.

Os traigo un conjuro inspirado en el último PDF que ha salido para los mecenas: Secretos Enterrados. Va mucho de sacar secretos de la gente y pensé que tenía que haber una forma de que evitarlo. Además es un gran método de presentar personajes amnésicos que recuperan sus recuerdos en un momento dramático. Está un tanto basado en Johny Mnemonic, Zaphod Beeblebrox y un montón de pelis de espías.

Nivel: 2.

Efecto: tras realizar el ritual con éxito, el objetivo de este habrá olvidado por completo el secreto que deseaba bloquear, así como muchos de los hechos que lo rodeaban como cuándo o dónde lo aprendió, las veces que puede haberlo aplicado o, especialmente, el hecho de haberlo bloqueado.

Intentar recuperar o robar este secreto por medios mágicos y sobrenaturales es en términos generales imposible. Los gusanos harbu-miqaari no pueden alimentarse de él si el objetivo muere.

Solo la contemplación de la misma imagen que se usó para bloquear el secreto en un principio, puede desbloquearlo.

Lanzamiento: el objetivo de este conjuro puede ser el propio brujo o cualquier otra persona.

Para lanzarlo es necesaria una ceremonia que se alarga durante seis días y que precisa de un coro que realice distintos cantos y bailes siguiendo las instrucciones del brujo, baños purificadores de distintos tipos y la consumición de drogas menores. La ceremonia es altamente ritualizada y todos los pasos deben llevarse a cabo siguiendo un orden preciso y en momentos preciosos de a cuerdo a un patrón astrológico.

Esta larga ceremonia tiene dos puntos clave. En uno de ellos el objetivo debe encerrarse en una sala a solas con otro ser humano (voluntario o no) y contarle detalladamente y con viveza el secreto que quiere olvidar, así como todo lo que sea posible añadir sobre él. La sala debe ser fuertemente vigilada, pues nadie más debe oír lo que en ella se dice. Al día siguiente, la persona que sirviera de oyente ha de ser quemada en vida.

El último día del ritual, el brujo preparará un brebaje con potentes hierbas que servirá al objetivo del ritual en gran cantidad. Este deberá beberlo muy despacio a lo largo de horas mientras contempla fijamente una imagen labrada en piedra, pintada con tintes o tallada en madera. Tras lo cual caerá en un profundo trance durante el cual la imagen ha de ser destruida. Cuando despierte, el ritual habrá surtido efecto.

Aprendizaje: para aprender este conjuro es necesario en primer lugar que el brujo encuentre una tablilla donde se describa los pasos necesarios para hacerlo, cosa tampoco demasiado complicada dado el gusto de los brujos de todas partes por ocultar secretos.

En la tablilla encontrará que es necesario que forje en oro un pequeño disco cóncavo en cuya cara interior inscribirá en caracteres diminutos símbolos mágicos y advocaciones a Kogu-shotosu.

Entonces habrá de buscar un maestro cirujano que le practique una trepanación, es decir, que le retire una parte del cráneo del tamaño exacto para que encaje el disco de oro y, en lugar del hueso, ponga el disco, volviendo a cubrirlo todo con el cuero cabelludo.

Al acabar el proceso, la forma de lanzar este conjuro habrá llegado a su conocimiento.

Gracias por leerme. Valmar Cerenor!

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