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viernes, 15 de abril de 2016

Religión y superstición en Sukero

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Como en otros muchos ámbitos, la especial idiosincrasia de Sukero hace que sea un mosaico de religiones. Juzgar las creencias de los demás va en contra de la libertad y la democracia, especialmente si producen dinero y crecimiento. Por eso en la ciudad podemos encontrar de todo: budismo, shintou, islam, todos los sabores de cristianismo...

Esto último no es baladí, después de que en el siglo XX se produjera el gran cisma católico del Extremo Oriente (en buena medida debido a las divisiones entre obispos aceptados por el gobierno chino y aquellos clandestinos leales al Papa), una miriada de sectas heréticas conocidas como "catolicismo de marca blanca" se han extendido como el fuego por todo el mundo y han tomado muchas influencias de cultos personales, protestantismo extremo y enseñanzas de gurús locos. Y, por supuesto, incluso si tu religión es reconocida en cualquier otro sitio como una patochada enorme, Sukero siempre la estará esperando con los brazos abiertos. No en vano es a menudo llamada la Ciudad de los Mil Antipapas. Joder, que hay unos tipos que creen que la tierra solo tiene cinco mil años y Jesucristo era un dinosaurio.

Católicas o no, nuevas religiones nacen y mueren en la ciudad constantemente, normalmente para sacar partido de cualquier fenómeno mediático reciente que ha tocado la espiritualidad de la gente, sacar algún dinero, hacer publicidad de algún producto o conseguir un grupo de fieles para otros propósitos.

Los frecuentes encuentros ecuménicos son, para sorpresa de nadie, bastante parecidos a una feria de muestras o una convención comercial donde incontables fes simplemente ponen su stand y esperan que algún pardillo se deje convencer de que el suyo es el verdadero camino a la verdad.

Solo para ilustrar, a continuación se sigue un extracto de los preceptos del círculo más bajo del Proyecto Sigma, un grupo religioso minoritario relativamente normal en Sukero. Aunque la mayoría de sus preceptos son solo para iniciados, los más básicos como estos están disponibles de forma abierta en su web (www.projectsigma.skr):
  1. La tierra tiene forma cúbica.
  2. Esto es posible porque la luna no existe..
  3. La felicidad se halla solo en desprenderse de lo material.
  4. Todos descendemos de criaturas de luz pura, excepto los blancos, que descienden todos del mismo perro.
  5. Por tanto todos estamos emparentados unos con otros, excepto los blancos.
  6. La luna no existe. Es una conspiración de la astronomía occidental. Cree solo la verdad.
  7. El semen es una hormona nociva que destruye las débiles hormonas neuronales, por eso los hombres deben yacer con tantas mujeres distintas como sea posible.
  8.  La Gran Hermandad Blanca Estelar vela por nuestro proyecto y nos envía regularmente sus rayos de sabiduría. Están entre nosotros.
  9. Los perros hablan, pero solo los blancos los entienden.
  10. Los ateos tienen un mayor ratio de infertilidad porque Dios no quiere que se reproduzcan.
  11. 1Si te unes al Proyecto Sigma, serás feliz para siempre. Si no, estarás condenado. El fin está cerca.
  12. Qa'avlah! Qa'avoloh!
Y, como digo, eso no es lo más raro. Existen por ejemplo cibercultos que intentan crear una única conciencia digital conectando a todos sus miembros, o buscar la iluminación recorriendo internet al azar a toda velocidad con ayuda de poderosos procesadores e interfaces, o adorar a Inteligencias Artificiales salvajes con aires de grandeza.

U otros que están seguros de que llevar jerseys cuando hace más de veinte grados es prueba de brujería o de que el caramelo es la única comida en la que no se pueden introducir edulcorantes de control mental.
O cultos de chamanismo urbano que adoran al metro como un dios de la muerte subterráneo o escuchan los patrones del tráfico para obtener profecías o conectan con animales como ratas y palomas en sus ceremonias religiosas en las que se ponen hasta las cejas del moho azul que crece en los subterráneos olvidados de la ciudad.

Pero eso es la religión más o menos organizada. En Sukero abundan toda clase de supersticiones y creencias informales que pueden ser patrañas o no (recuerda, en Sukero, cualquier cosa rara que te cuenten tiene 50% de posibilidades de ser cierta): la señora que va a ver al doctor Ousama para que le haga un ritual con sangre de pollo, el niño que deja un dulce en el santuario de una roca sagrada, el hombre que teme oír el canto de un cuervo, la madre que se asegura de que la cama de su hijo no apunte al este para que no sea reemplazado por un doppelganger, el jugador que se asegura de tener sus números a suerte a mano, el anciano que compra una rana en un frasco de cristal para que asuste a la muerte o los tenderos y restauradores que se reúnen frente la estatua del Gran Benefactor esperando que la suerte sonría a su negocio:


En definitiva, cualquiera que venga a Sukero buscando prosperidad en esta vida y en la otra, aquí encontrará un amplio abanico de posibilidades. Pero hará bien teniendo cuidado al escoger, pues puede que le arruinen esta vida y no halle consuelo cuando llegue a la siguiente.

Gracias por leerme. Valmar Cerenor!

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