Ha pasado ya medio año desde
la última vez que publiqué uno de mis actuals plays de
Sukero City. No penséis que he dejado de jugar (tampoco he dejado de jugar tanto como me gustaría porque nunca juego tanto como me gustaría) y como prueba, ahí va una somera narración de las desventuras de Takeshi:
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Fuente: Megazone 23 Part II
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- Después de dejar frito a Qing-lu, mano derecha de una de las familias de las tríadas a los que había robado cierto microchip que pensaba vender, era hora de hacer negocios.
- Fue hasta el garito-cuartel general de los Long Street Commandos, la banda a la que pertenece, ahí consiguió convencer a Akira, la jefa, de que le dejara manga ancha para ocuparse de la venta del chip, así como al resto de la banda. Lo consiguió a pesar de las reticencias de Delgado, el segundo al mando.
- Estuvimos generando los detalles de su banda como número de integrantes, dinero, armas, actividades y demás. Ahora que lo pienso, necesitaré un generador aleatorio de eso y sablear más cosas de Cyberpunk 2020 descaradamente.
- Pasaron una noche tranquila en el piso franco que la banda usa para esconder rehenes y material robado. Ahora mismo solo hay un par de bidones con productos químicos que se cayeron de un camión.
- Dado que habían quedado con un prestamista (MacCailin, antiguo aristócrata y financiador del Ejército de Liberación Escocés) en un sitio elegante (el Hanging Gardens, un restaurante-jardín botánico en la cima de un rascacielos) esa misma noche, fueron a comprarse ropa nueva. Este juego necesita un generador de centros comerciales.
- Se toparon con un vagabundo, que resultó ser un tipo totalmente negro (no de raza, negro de verdad) que podía alargar su cuerpo y convertirse en un perro enorme a voluntad. Puto Gordo, uno de los amigos de Takeshi, lo dejó KO agarrándole el brazo y estampándolo contra el suelo desde una farola. Nice.
- De vuelta a casa, Takeshi buscó información sobre el asunto, pero lo máximo que encontró fue información sobre un grupo ultracristiano decidido a quemar vagabundos si su candidato ganaba las elecciones. Era obvio que necesitaba un subsistema de internet.
- Pasaron algunas horas y Takeshi fue apuñalado por la espalda por Fuli, el pequeño informático, usando un cuchillo de cocina. Takeshi es el único que se percata de que tenía unos hilos clavados en el cuerpo antes de desmayarse, los mismos que ahora se han pegado a Puto Gordo.
- Al tener claro que los hilos vienen desde la ventana del piso, esquiva a puto gordo y se lanza lo más rápido que puede hacia fuera, para descubrir que la ventana está cubierta con alambre afilado. Queda inconsciente a -2 puntos de vida y el resto de sus amigos están menos cerca de él que Puto Gordo.
- Tensión.
Gracias por leerme.
Valmar Cerenor!
Tensión, ¡TENSIÓN!
ResponderEliminarVoy a morir!!!
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