Saludos, muníficos lectores. El sistema de creación de artefactos aleatorios de Realms of Crawling Chaos mola, ¿qué más puedo decir? Para probarlo he creado cinco artefactos que ahora os comparto.
1. La brújula de aniquilación produce un rayo que convierte a su víctima en un montón de carne gelatinosa incapaz de ver o respirar. Pierde 1d3 puntos de golpe cada turno a medida que se ahoga y no puede hacer nada en este estado. Dadas las propiedades de la brújula, solo puede lanzar su rayo en dirección norte y es necesario maniobrar (con una tirada de ataque) para colocarse en la posición relativa adecuada para golpear al objetivo. Una pifia indica que el rayo se ha disparado cuando su propio portador estaba hacia el norte y se golpea a sí mismo. Una horrible voz susurra desde la brújula en un idioma indescifrable.
2. El látigo de almas es un artefacto que debe prepararse previamente: el usuario debe arrancarse una tira de piel (preferiblemente de la espalda) y añadirla como una cola más al azote, para luego usarlo para realizar un sacrificio humano azotándolo hasta la muerte. Una vez hecho esto, el artefacto quedará vinculado al usuario servirá como un conjuro de transmigración para contener su psique en caso de que muera, de modo que pueda tomar otro cuerpo. El látigo tiene colas de antiguos usuarios, no todos ellos humanos.
3. La pirámide de putrescencia, llevada como un colgante, hace que el conjuro nube aniquiladora cure a su portador en lugar de dañarlo, pero sus energías místicas refuerzan los misiles mágicos, haciendo que hagan el doble de daño a su portador. Además, este no puede llevar comida o líquidos consigo, pues la pirámide hace que se pudran rápidamente si están cerca de ella unas pocas horas.
4. La corona de dominio está hecha de huesos huecos que no pertenecen a ninguna criatura de este mundo. En su interior se producen esporas de hongos que pueden controlar a criaturas vivas de los alrededores y ponerlas al servicio del portador de la corona. Una vez al día el portador puede liberar una nube de esporas que imita el efecto de un anillo de controlar animales, comandar humanos o comandar plantas, a elección del portador.
5. La gema de Lomar es un topacio muy claro y pulido que actúa como una lente. Permite leer cualquier material escrito como un conjuro de leer lenguajes mirando a través de ella. No obstante, aquel que la sujete en sus manos sentirá un frío glaciar que puede llevarlo a la hipotermia, sin importar dónde esté o qué lleve puesto.
Y eso es todo, espero que os sean útiles. Gracias por leerme. Valmar Cerenor!
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